La playa de Piedade, en la región metropolitana de Recife, en el noreste de Brasil, registró en las últimas 24 horas dos ataques de tiburones a personas, según reportaron las autoridades.
El ataque más reciente ocurrió este lunes cuando una joven fue mordida en varias partes del cuerpo por un escualo y, de acuerdo con el Hospital de la Restauración de Recife, parte de uno de sus brazos le fue amputado.
El ataque se produjo a menos de 500 metros del que se registró el domingo, cuando un joven de 14 años fue mordido y su pierna también tuvo que ser amputada, en un suceso también ocurrido en la playa de Piedade, situada en el municipio de Jaboatão dos Guararapes.
El Comité Regional de Monitorización de Incidentes con Tiburones (CEMIT, por su sigla en portugués) indicó a EFE que especialistas de la entidad están “analizando” los dos casos y el “intervalo corto” que tuvieron los recientes ataques.
El organismo señaló que 36 kilómetros de playas localizadas entre los municipios de Olinda y Jaboatão dos Guararapes, pasando por Recife, la capital regional, fueron declarados en “situación crítica” y con “riesgo de nuevos ataques”.