La modernización de las instalaciones en el emblemático espacio comercial entra en su última etapa dentro de un proyecto inclusivo y sostenible. Puesteros, feriantes y vecinos destacaron la importancia de la puesta en valor del edificio.
Las reformas estructurales garantizan la seguridad e higiene al momento de manipular los alimentos, a través de la sectorización por áreas. Además, se planificó un nuevo sector de carga y descarga de los diversos productos que ingresan al mercado y se incorporaron cámaras frigoríficas. También se habilitó una zona de egreso para residuos.
El predio contará con un área exclusiva para ventas de productos regionales. En la atención específica para la inclusión, se ejecutan obras y medidas sanitarias destinadas especialmente a personas con discapacidad, por lo que se sustituyó la estructura existente. Los pisos y pasillos, tanto internos como externos, tendrán la misma dinámica para facilitar un recorrido libre de obstáculos. Para ello, se construyó un sendero podo táctil en todas las áreas de circulación del mercado.
Nota: Mirta Alvarez – Comerciante