Las cámaras empresariales afirmaron que la medida afecta sensiblemente a las importaciones y exportaciones. Advirtieron por el abastecimiento energético.
El paro de trabajadores portuarios que mantiene fuera de servicio a los remolcadores en los principales puertos del país paraliza al 80% del comercio exterior argentino, denunciaron este domingo las cámaras empresariales.
Según un informe publicado por la Federación de Empresas Navieras de Argentina (FENA), el 80% del comercio exterior argentino, contemplando importaciones y exportaciones, está paralizado.
Medidas en puertos
Esto es como consecuencia de las medidas de fuerza lanzadas por Sindicato de Conductores Navales (Siconara), que desconoció la conciliación obligatoria por 15 días lanzada por el Ministerio de Trabajo para destrabar el conflicto que se inició por un reclamo de recomposición salarial.
Al respecto, se remarcó que “la matriz energética está siendo afectada dado que los buques tanque están impedidos de cargar petróleo crudo y producto. En caso de extenderse el paro podría significar el desabastecimiento energético para nuestra economía”
“Muchos de los buques operados por empresas asociadas a las Cámaras que integran F.E.N.A. se encuentran afectados al transporte de combustible tanto para el mercado interno como para las usinas eléctricas, por lo que la paralización de estos acarrearía un concreto peligro de desabastecimiento en un plazo breve”, explicó la cámara.
Según el reporte, la medida paraliza a 32 remolcadores portuarios, 13 buques petroleros, 2 buques supply y 1 remolcador de empuje, un total de 48 naves paralizadas.
Fragata Libertad
La situación había puesto en jaque el regreso de la Fragata Libertad a Buenos Aires. En principio, no pudo ingresar a puerto y debió navegar a La Plata, donde pasó varias horas.
Finalmente, el buque escuela que navegó por cuatro meses como parte de su 50° viaje de instrucción retornó a la Ciudad a las 18.
La cartera laboral había intercedido en horas del mediodía para suspender cualquier medida por el término de dos semanas y, en el transcurso, acercar a las partes a una solución.