Hoy por la vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores, Boca enfrentará a Palmeiras en el Allianz Arena de San Pablo, una cancha campo de juego no es de pasto natural, sino de césped sintético. ¿Qué diferencias hay y cómo puede eso afectar al equipo de Jorge Almirón?
Tras el 0 a 0 en la ida, partido en el que Boca no pudo traducir en goles su enorme superioridad, el Xeneize ahora tendrá la difícil tarea de imponerse en el Allianz Parque de San Pablo, la cancha de Palmeiras. Pero más allá de que deberá visitar a uno de los mejores equipos del continente, campeón de la Copa Libertadores en 2020 y 2021 —en 2022 llegó a semifinales—, se enfrentará a otro rival: el césped sintético.
«Me preocupa simplemente que es sintético y no césped natural… Es un poco raro que a esta altura de la vida estemos hablando que un equipo de fútbol tiene cancha de sintético. La CONMEBOL o la FIFA deberían decir ‘o híbrido o césped natural’, porque esto es fútbol. Para el césped sintético está el hockey», sostuvo Sergio Romero, arquero de Boca, tras la ida en La Bombonera.