Un tribunal de Bielorrusia sentenció a 12 años de cárcel a la ex nadadora olímpica Aliaksandra Herasimenia y al activista político Alexander Opeykin después de haber sido declarados culpables por cometer supuestamente acciones destinadas a causar daño a la seguridad nacional.
El Tribunal de la Ciudad de Minsk los condenó por crear la asociación Fondo de Solidaridad Deportiva Bielorrusa y difundir “deliberadamente información falsa” a través de medios de comunicación e Internet sobre los eventos que tuvieron durante la campaña electoral por las elecciones de 2020, según información de la agencia estatal BelTA.
“Han sido declarados culpables por hacer llamados públicos para cometer acciones destinadas a causar daño a la seguridad nacional de Bielorrusia, incluido el uso de medidas restrictivas (sanciones) contra Bielorrusia, personas físicas y jurídicas de la república”, esgrime el texto de la sentencia.
Aliaxandra Herasimenia, tres veces medallista olímpica durante los Juegos Olímpicos de Londres (2012) y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro (2016), deberá cumplir su condena en una cárcel general. Mientras, Opeykin deberá ingresar en una prisión de régimen reforzado, según detalló la citada agencia.
Esta condena tiene lugar más de un año después de que la atleta olímpica bielorrusa Krystsina Tsimanouskaya denunciara en los Juegos Olímpicos de Japón que las autoridades de su país la estaban obligando a abandonar Japón contra su voluntad.
La corredora de 200 metros había expresado previamente sus críticas contra el comité bielorruso, que dirige el hijo del presidente del país, por obligarla a correr en un evento de relevos con poca anticipación. El equipo olímpico de Bielorrusia anunció más tarde que la habían retirado de la competición debido a su “estado emocional y psicológico”.
Bielorrusia fue estremecida por enormes protestas tras las disputadas elecciones de agosto de 2020, que Lukashenko dice haber ganado y que son consideradas fraudulentas tanto por la oposición bielorrusa como por Occidente. Las autoridades respondieron a las protestas con una fuerte represión donde más de 35.000 personas fueron arrestadas y miles fueron golpeadas por policías. A consecuencia, Occidente impuso punitivas sanciones económicas.
Además de la pena de cárcel, el tribunal ordenó confiscar el apartamento de Herasimenia, su automóvil y 48.000 dólares que tenía en sus cuentas bancarias.
Según el principal grupo de derechos humanos de Bielorrusia, Viasna, hay 1.439 prisioneros políticos actualmente en el país.
La líder opositora Sviatlana Tsikhanouskaya, quien también ha sido perseguida y vive en exilio en Lituania, condenó el lunes las sentencias impuestas a Herasimenia y Opeikin.
“¡Una vergüenza! … Así es como el régimen trata de castigar a los opositores en el exilio”, tuiteó Tsikhanouskaya. “El régimen no puede detenerlos, pero le confiscó su propiedad en Bielorrusia, incluyendo un automóvil y un apartamento”.
Fuente: Infobae con información de Europa Press.